¿Qué es violencia realmente en una pareja?

-En una relación de pareja, pueden ocurrir muchas situaciones. 


Cuáles son los indicadores de la violencia que es preciso tener en cuenta en una relación de pareja. 

Generalmente, si yo tengo mal concepto de mí misma, me encontraré con personas que tendrán mal concepto de mí. Si yo no me doy valor y no me quiero a mí misma, si no tengo amor propio, es más fácil que me encuentre con personas que no me valoren y que me traten mal. 

El primer punto a tratar en una relación, es tomar conciencia de cómo me trato yo a mí misma, de cuánto amor propio tengo, de qué actitud tengo ante mí y ante la vida. Partiendo de esta situación, tomaré conciencia de qué intención tengo hacia la otra persona, qué quiero de la otra persona y cómo me expreso con ella. 

Hay ciertas condiciones necesarias para que la pareja sea una pareja sana.



-La atracción física es lo primero que nos conecta con una posible pareja.

-La sensación de que el cuerpo te pide estar con esa persona.

-El amor que se tienen ambos miembros de la pareja. En un principio ocurre el enamoramiento entre ellos, aunque no todas las relaciones tienen por qué pasar por el enamoramiento. 

-La ley de equilibrio es algo que es preciso tener en cuenta, en una relación de pareja sana. El dar y el tomar, en la medida, nos ayuda a crecer como personas y en pareja. Podemos dar de sí, o dar de no. No siempre tenemos que estar disponibles para nuestra pareja. Si no podemos dar en ese momento, la pareja, no tiene por qué seguir dando. 

-Darle un buen lugar a mi pareja y a su familia de origen, garantiza las buenas relaciones en la pareja.

- El deseo mutuo de que nos vaya bien, también es algo a tener en cuenta, las buenas intenciones, el respeto mutuo, que sea fácil la relación, que haya gustos comunes, que haya un cuidado mutuo, que haya un proyecto común; son condiciones necesarias para tener en cuenta para fomentar relaciones sanas de pareja.


Muchas veces las relaciones de pareja, se basan en hacerse daño mutuamente, y de esta manera, es una forma de no separarse, ya que la sensación de que la otra persona nos debe algo, nos ata a ella, y nos dificulta separarnos de la misma.


Las relaciones de pareja, que se basan en hacerse el bien mutuo, sería la mejor manera de relacionarse. 

Realmente, hay momentos para todo en una relación estable de pareja estable.


El saber gestionar las relaciones de pareja, es un arte y no hay un manual para ello.


Como psicóloga especializada en pareja y en sistemas familiares, les invito a que se pongan en contacto, para poder resolver cualquier bloqueo o dificultad que encuentren en su relación de pareja. 

LA  SEPARACION  DE  LA  PAREJA

Cuando una pareja toma la decisión de separarse, muchas veces los miembros de la pareja, no saben gestionar adecuadamente sus emociones. Cuando no tienen hij@s en común, es relativamente más fácil la separación, aunque dependerá de cada persona, de la forma que tenga de percibir la situación. 


Cuando la pareja tiene hij@s, la situación es más complicada. L@s hij@s forman parte de las dos familias, tanto materna como paterna. Es por ello, que los conflictos y la forma que tienen de relacionarse los padres, afecta a l@s hij@s para bien o para mal. 


Cuando los padres se separan, no se separan como padres de l@s hij@s, se separan como pareja. L@s hij@s, no tienen por qué formar parte del conflicto de los progenitores, pero muchas veces se sienten implicados en el conflicto, y esto es precisamente lo que debemos evitar. 

Debemos distinguir entre padre/madre biológicos y si éstos están disponibles para cuidarse ellos mismos y para poder cuidar de l@s hij@s. En situaciones de crisis, las personas sufren y sería muy importante que tanto padre como madre, pidieran ayuda para poder ofrecer lo mejor de ellos a sus propios hij@s. 


No duden en ponerse en contacto con este gabinete de Psicología, y podremos facilitar la gestión de sus emociones en estas situaciones. 


DERECHOS ASERTIVOS DE LA INFANCIA

-Los niños forman parte del grupo social más vulnerable de la población. El poder acompañar en el proceso madurativo de los niños y niñas, es un arte y no hay un libro de instrucciones que podamos seguir. 

Cada padre y madre hacen como pueden, dependiendo de cómo han sido educados cada uno de ellos. 

Es por ello, que si los padres, no se ponen de acuerdo en cómo educar a sus hijos e hijas, va a ser probablemente bastante poco beneficioso para éstos. 


La flexibilidad, la autocomprensión y la compresión hacia el otro, va a ser imprescindible adquirirlas, para poder avanzar en las relaciones con los miembros de la familia más cercanos.